EUROPA
PRESS
1 octubre
2016
El Día Mundial contra la Hepatitis se conmemora el 28 de julio,
sin embargo la hepatitis C, debido a su gran prevalencia, se ha ganado tener un
Día Internacional propio - que se celebra este sábado -, para redoblar los
esfuerzos nacionales e internacionales de lucha contra esta enfermedad.
Con el
objetivo de dar a conocer la enfermedad y aumentar la sensibilización de la
población, en Infosalus.com te explicamos en 8 puntos breves todo lo que debes
saber de la hepatitis:
1.
La hepatitis C es una
enfermedad del hígado causada por el virus del mismo nombre; ese virus puede
causar una infección, tanto aguda como crónica, cuya gravedad varía entre una
dolencia leve que dura algunas semanas, y una enfermedad grave de por vida.
2.
En todo el mundo hay
entre 130 y 150 millones de personas con infección crónica por el virus de la
hepatitis C. Un número considerable de esas personas con infección crónica
desarrollarán cirrosis o cáncer de hígado, mientras que, aproximadamente,
700.000 personas mueren cada año por enfermedades hepáticas relacionadas con la
hepatitis C.
3.
Aproximadamente entre
un 10-30% de las personas infectadas elimina el virus espontáneamente en un
plazo de seis meses, sin necesidad de tratamiento alguno. El 70-90% restante
desarrollará infección crónica, y en estos casos el riesgo de cirrosis hepática
a los 20 años es del 15-30%, y entre el 1-5% cáncer de hígado.
4.
La buena noticia es
que en los últimos años se ha avanzado mucho en su tratamiento y ya existen
antivíricos que pueden curar más del 90 por ciento de los casos de infección
por el virus de la hepatitis C, lo que reduce el riesgo de muerte por cáncer de
hígado y cirrosis, pero el acceso al diagnóstico y el tratamiento es limitado.
No obstante, lo deseable sería tener una vacuna contra la hepatitis C, pero la
investigación en esa esfera continúa.
5.
Si observamos como se
reparte por el mundo, según los datos de la Organización Mundial de la Salud,
las regiones más afectadas son Asia central y oriental y África. Dependiendo
del país, la hepatitis C puede concentrarse en algunas poblaciones (por
ejemplo, entre los consumidores de drogas inyectables), y/o en la población en
general. Existen numerosas cepas (o genotipos) del VHC, cuya distribución es
variable según la región.
6.
Los expertos recuerdan
que el diagnóstico precoz puede prevenir problemas de salud derivados de la
infección, y también la transmisión del virus. No obstante, la hepatitis C no
siempre requiere tratamiento, porque en algunas personas la respuesta
inmunitaria eliminará la infección espontáneamente y algunas personas con
infección crónica no llegan a presentar daño hepático. Cuando el tratamiento es
necesario, el objetivo es la curación.
7.
El tratamiento de la
hepatitis C está cambiando rápidamente. Hasta hace poco se basaba en la
administración de interferón y ribavirina, que exigía
inyecciones semanales durante 48 semanas y curaba aproximadamente a la mitad de
los casos, pero provocaba reacciones adversas frecuentes y en ocasiones
potencialmente mortales.
Recientemente
se han desarrollado nuevos medicamentos antivíricos, denominados antivíricos de
acción directa (AAD), que son mucho más eficaces y seguros, y mejor tolerados
que los tratamientos antiguos. El tratamiento con AAD puede curar a la mayoría
de las personas infectadas por el VHC y es más breve (normalmente 12 semanas) y
seguro. Aunque los costos de producción son bajos, los AAD antivíricos siguen
siendo muy caros en muchos países de ingresos altos y medianos.
8.
En mayo de 2016, la
Asamblea Mundial de la Salud adoptó la primera Estrategia mundial del sector de
la salud contra la hepatitis vírica, 2016-2021, que destaca la función crucial
de la cobertura sanitaria universal y cuyas metas están alineadas con las de
los Objetivos de Desarrollo Sostenible. El objetivo final es eliminar las
hepatitis víricas como problema de salud pública, y las metas consisten en
reducir los casos incidentes en un 90% y la mortalidad en un 65% de aquí a
2030.